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RTVE.es
26.07.2012
La exministra de Economía, Elena Salgado, ha asegurado que advirtió al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, antes de que tomara posesión, de queel objetivo de déficit del 6% para el año 2011 podía desviarse de su objetivo, ya que no contaba con información suficiente de las comunidades autónomas.
Así ha respondido ante una pregunta durante su intervención de la Comisión de Economía del Congreso de los Diputados, donde ha señalado que
se reunió con Rajoy pocos días antes de su investidura y le alertó de que la forma en que se cerrara el ejercicio podría implicar que el déficit del Estado superara el previsto, como finalmente sucedió,
elevándose hasta el 8,9%.
Salgado ha explicado que en la conversación con Rajoy le apuntó que el cumplimiento o no del objetivo de déficit dependía de la forma en que se cerrara el ejercicio, tanto por parte de la administración central como de las comunidades autónomas.
Así, ha asegurado que le dijo a Rajoy que en ese momento él, como líder del partido que gobernaba la mayor parte de las comunidades autónomas, debía tener más información sobre el déficit de las regiones que ella misma, entonces ministra de Economía y Hacienda.
En concreto, la exvicepresidenta se ha referido al déficit registrado por la Comunidad de Madrid, una región que no había hecho uso de la posibilidad de llegar al 1,3% de desfase y que, por tanto, hacía pensar al Gobierno que podría asumir parte del exceso de las demás, aunque "la realidad demostró que no era así".
Salgado ha reconocido que el déficit de 2011 fue mayor del que había anticipado al nuevo Gobierno, incluso en lo que se refiere a la administración central, aunque ha defendido que nunca llegó a darle una cifra concreta.
"Evitar que España fuera rescatada"
Salgado, ha asegurado que mientras tuvo la responsabilidad del departamento en el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, "una prioridad era evitar que España tuviera que ser rescatada". Salgado se ha referido en estos términos ante la Comisión de Economía del Congreso, al ser preguntada por la posibilidad de haber creado un 'banco malo' para reunir los activos tóxicos.
En este sentido, ha explicado que "hoy por hoy se desconoce cuál es la valoración de activos de ese banco malo que se va a crear". Además, ha señalado que las decisiones adoptadas por el actual Gobierno "son legítimas" y que no le corresponde a ella valorarlas, a lo que ha añadido que "las consecuencias están a la vista de todos".
Para explicar su postura, la responsable de Economía con el anterior Gobierno ha recordado que otras economías que no forman parte del euro y disponen de su propio organismo regulador monetario, como EE.UU. y Reino Unido sí han utilizado la figura del banco malo.
La exvicepresidenta ha defendido la transparencia del proceso de reestructuración financiera realizado en su etapa como responsable del departamento asegurando que "se toman las decisiones con los datos disponibles en cada momento y con los datos que había toamos las decisiones que había que tomar teniendo en cuenta el mínimo coste para los contribuyentes".
Salgado ha repasado el proceso de reestructuración financiera realizado desde el 2008, ante la Comisión de Economía del Congreso. "La historia no ha terminado y no me corresponde a mí hacer valoraciones", ha señalado Salgado durante su comparecencia.
La exvicepresidenta ha garantizado que todas las decisiones se tomaron pensando queel coste debía ser "mínimo" para el contribuyente y que había que evitar resoluciones "desordenadas" que podrían haber producido "contagio, pérdida de confianza y más restricciones" de crédito.
Las entidades "debían detallar todos los activos inmobiliarios"
Sobre el problema de los activos inmobiliarios, al que la exministra ha hecho referencia desde el inicio de su comparecencia, ha asegurado que "a medida que se prolongaba la crisis se producía un deterioro de activos, particularmente con la exposición a los activos inmobiliarios".
En los test de estrés realizados en julio de 2010 y 2011 las entidades "debían detallar todos los activos inmobiliarios con todo tipo de especificaciones", ha explicado.
Salgado ha insistido en la fortaleza de la banca española recordando que
las pruebas de estrés realizadas el 15 de julio de 2011 revelaron que "
solo cinco entidades españolas quedaban por debajo del 5% del core capital, lo que demostraba la solvencia del sistema financiero español".
La "resistencia del sector bancario español había sido notable en comparación con el resto de países del entorno y podían mantenerse sin apoyo público" hasta 2008, cuando considera que empieza a dejarse notar la restricción de crédito. Esa mayor resitencia al inicio de la crisis se debe, ha explicado a que el sistema financiero español contaba con un régimen de supervisión más "prudente" que otros países y porque las entidades no habían participado en productos más complejos.
Así, con los primeros indicios de la crisis financiera, ha añadido, se inició el proceso de reestructuración que "debía ser transparente", y por ello, ha señalado, "el Gobierno quiso contar con todos" y dirigiéndose a los paralamentarios: "Muchos de ustedes recordarán mis llamadas telefónicas cada vez que el Gobierno quería impulsar una norma, a todos los grupos, grandes y pequeños".
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