27.01.10 - 00:28 -
A. PÉREZ / AGENCIAS MURCIA.
La nevada dejó aislada la base militar de Sierra Espuña y registró un espesor de hasta diez centímetros en las pedanías de Moratalla
Carreteras de Caravaca, Moratalla y Lorca tuvieron que ser cortadas por el azote del temporal
En tierra, mar y montaña. El temporal azotó ayer la Región de Murcia por sus cuatro costados. En la costa, rachas de viento de hasta 90 kilómetros por hora. En el interior, precipitaciones de hasta 75 litros por metro cuadrado. Y en las zonas de montaña, diez centímetros de nieve.
La nevada, según los de la Agencia Estatal de Meteorología, fue especialmente intensa en las pedanías altas del Noroeste ( Cañada de la Cruz, Campo de San Juan y Benízar). En algunas de estas poblaciones las comunicaciones por carretera se vieron afectadas, y los niños no pudieron ir al colegio porque el servicio de transporte escolar se tuvo que suspender.
También la nieve fue la responsable de que la base militar del Morrón EVA 13 de Sierra Espuña se quedara aislada y el personal destinado no pudiera llegar a ella ya que el acceso a la altura del Collado Bermejo era impracticable. La cota de nieve era ayer de 1.000 metros.
La lluvia tampoco fue indiferente al interior del oriente regional, llegando a alcanzar los 75 litros por metro cuadrado en Las Alquerías de Totana, informa Paco Espadas.
El director general de Carreteras José Guijarro, presumió ayer tarde de que «todas las vías que integran la Red de la Comunidad Autónoma se encuentraban abiertas al tráfico, gracias al trabajo de las brigadas de conservación de la Comunidad.
Un equipo formado por 140 personas trabajó resolviendo las incidencias causadas por el temporal, repartió 30 toneladas de sal y alertó a los conductores mediante señalización en las carreteras con riesgo de nevadas.
Los quitanieves, motoniveladoras con cuchilla de empuje y extendedores de fundentes trabajaron durante toda la jornada en la RM-730 (de Caravaca al límite de la Región con Granada), así como en la RM-702 (desde la pedanía caravaqueña de Barranda hasta el Sabinar), y en la RM-703 (de Moratalla a su pedanía de Campo de San Juan).
También se realizaron trabajos de limpieza y prevención en la RM-702 (entre Barranda y Nerpio), y en la RM-503 (de Bullas a Aledo), así como en la RM-504 (de Cehegín a la pedanía lorquina de La Paca). Asimismo, en la RM-621 (de Lorca a su pedanía de Purias), los equipos retiraron el agua acumulada debido a las intensas lluvias registradas en la zona.
Esta última infraestructura estuvo cortada al tráfico durante parte de la jornada, al igual que las carreteras de Caravaca y Moratalla que abrió la Guardia Civil a media tarde tras haber estado con nivel negro -cortada- durante las primeras horas de la mañana.
A. PÉREZ / AGENCIAS MURCIA.
La nevada dejó aislada la base militar de Sierra Espuña y registró un espesor de hasta diez centímetros en las pedanías de Moratalla
Carreteras de Caravaca, Moratalla y Lorca tuvieron que ser cortadas por el azote del temporal
En tierra, mar y montaña. El temporal azotó ayer la Región de Murcia por sus cuatro costados. En la costa, rachas de viento de hasta 90 kilómetros por hora. En el interior, precipitaciones de hasta 75 litros por metro cuadrado. Y en las zonas de montaña, diez centímetros de nieve.
La nevada, según los de la Agencia Estatal de Meteorología, fue especialmente intensa en las pedanías altas del Noroeste ( Cañada de la Cruz, Campo de San Juan y Benízar). En algunas de estas poblaciones las comunicaciones por carretera se vieron afectadas, y los niños no pudieron ir al colegio porque el servicio de transporte escolar se tuvo que suspender.
También la nieve fue la responsable de que la base militar del Morrón EVA 13 de Sierra Espuña se quedara aislada y el personal destinado no pudiera llegar a ella ya que el acceso a la altura del Collado Bermejo era impracticable. La cota de nieve era ayer de 1.000 metros.
La lluvia tampoco fue indiferente al interior del oriente regional, llegando a alcanzar los 75 litros por metro cuadrado en Las Alquerías de Totana, informa Paco Espadas.
El director general de Carreteras José Guijarro, presumió ayer tarde de que «todas las vías que integran la Red de la Comunidad Autónoma se encuentraban abiertas al tráfico, gracias al trabajo de las brigadas de conservación de la Comunidad.
Un equipo formado por 140 personas trabajó resolviendo las incidencias causadas por el temporal, repartió 30 toneladas de sal y alertó a los conductores mediante señalización en las carreteras con riesgo de nevadas.
Los quitanieves, motoniveladoras con cuchilla de empuje y extendedores de fundentes trabajaron durante toda la jornada en la RM-730 (de Caravaca al límite de la Región con Granada), así como en la RM-702 (desde la pedanía caravaqueña de Barranda hasta el Sabinar), y en la RM-703 (de Moratalla a su pedanía de Campo de San Juan).
También se realizaron trabajos de limpieza y prevención en la RM-702 (entre Barranda y Nerpio), y en la RM-503 (de Bullas a Aledo), así como en la RM-504 (de Cehegín a la pedanía lorquina de La Paca). Asimismo, en la RM-621 (de Lorca a su pedanía de Purias), los equipos retiraron el agua acumulada debido a las intensas lluvias registradas en la zona.
Esta última infraestructura estuvo cortada al tráfico durante parte de la jornada, al igual que las carreteras de Caravaca y Moratalla que abrió la Guardia Civil a media tarde tras haber estado con nivel negro -cortada- durante las primeras horas de la mañana.
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