El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, viaja a Berlín para reunirse con la canciller Angela Merkel en el marco de la XXIV Cumbre germano-española, un encuentro bilateral en el que intentarán limar asperezas tras el reciente cruce de reproches entre ambos mandatarios sobre el papel de Alemania en la crisis y las políticas de crecimiento. Esta cumbre se produce en un momento en el que la actualidad política en España está marcada por el llamado 'caso Bárcenas' sobre presuntos pagos opacos a miembros de la cúpula del PP a cargo del extesorero del partido. Aunque el jefe del Ejecutivo convocó este sábado a la plana mayor de su partido para afirmar rotundo que "nunca" cobró dinero negro, no podrá evitar responder a los periodistas sobre esta polémica.
Será en la rueda de prensa conjunta que ofrecerán ambos mandatarios al término de la bilateral y que podría llevar a que la canciller se pronuncie también sobre la corrupción. Además, será la primera vez que los periodistas podrán preguntar directamente a Rajoy, ya que este sábado optó por un discurso televisado sin admitir preguntas.
Rajoy acude a esta cumbre acompañado por el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo; el de Economía, Luis de Guindos; la titular de Empleo, Fátima Báñez; y el de Industria, José Manuel Soria (Industria), así como los secretarios de Estado de Comercio, Jaime García-Legaz, y la secretaria de Estado de Educación, Monserrat Gomendio.
El presidente del Gobierno y la canciller tuvieron oportunidad de verse hace justo una semana en Santiago de Chile, en el marco de la cumbre UE-América Latina y Caribe, donde mantuvieron un breve encuentro de apenas quince minutos sobre las políticas europeas para impulsar el crecimiento como tema de fondo. Precisamente en esa cumbre ambos se habían cruzado declaraciones a través de los medios de comunicación. Rajoy ha venido defendiendo la necesidad de que Alemania promueva "medidas expansivas" para tirar de la economía de la Unión Europea ya que España "no está en condiciones" de hacerlo porque "se lo impide" su situación económica. La canciller, en cambio, cree que su país "está haciendo su parte para contribuir a una zona euro robusta" y así lo ha manifestado públicamente.
La integración europea
Rajoy, que insiste en que hay que avanzar en la integración europea, defendió en Chile la necesidad de hacer una política macro común europea, de forma que los países que puedan, hagan un mayor esfuerzo, mientras que los demás realicen a su vez esfuerzos de consolidación fiscal. A su entender, si todos hacen un esfuerzo según sus posibilidades, el resultado final será el crecimiento.
En la agenda de esta bilateral figura la agenda europea y sus retos, la situación de la eurozona y el futuro de la Unión Económica y Monetaria, los proyectos convergentes de cara a Europa y la situación económica en España, según ha informado el Palacio de la Moncloa en un comunicado. Encima de la mesa estará también el Consejo Europeo del 7 y 8 de febrero, en el que se debatirá el marco financiero plurianual 2014-2020. El Gobierno de Rajoy ya ha anunciado que dará la batalla para limitar los recortes que se prevén en materia de política agrícola y de cohesión en el próximo presupuesto comunitario.
En ese encuentro hablarán también sobre la cooperación bilateral en temas de empleo (lucha contra el paro, cooperación institucional y programas de movilidad) y tratarán temas de energía, las relaciones comerciales bilaterales, las inversiones, intereses estratégicos en terceros países y la presencia inversora. Además, abordarán temas educativos como el desarrollo del acuerdo de cooperación entre ambos ministerios y la formación profesional.
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