El Jurado Provincial le reconoce a la familia Guirao la expropiación de una parcela de 3.500 metros cuadrados
El Jurado Provincial de Expropiación ha reconocido a los propietarios de una de las parcelas libres de San Blas el derecho a cobrar 681.000 euros en concepto de expropiación, más los intereses acumulados desde que se produjo la modificación urbanística que les indujo a reclamar su compensación.
El abogado Arturo Amores, especialista en Derecho Administrativo y profesor de la Universidad de Murcia, que representa a la familia Guirao, propietaria de la histórica casa Benimar -situada junto al solar-, calcula que los intereses ascienden a 54.000 euros. El origen de la reclamación se remonta «al planeamiento urbanístico de los años noventa, cuando el Ayuntamiento calificó la parcela como zona verde y no hizo la reparcelación para repartir las cargas urbanísticas ni creó la Junta de Compensación, de modo que a la familia Guirao le calificaron como zona verde 3.500 metros cuadrados y 700 metros cuadrados como viario», explica el jurista.
«Se ha omitido el procedimiento urbanístico legal para garantizar el trato equitativo, y ahora que se ha vendido el resto de las parcelas a terceros de buena fe, no se les puede exigir nada ni se puede reparcelar, así que planteamos la expropiación y el Jurado Provincial lo ha reconocido», afirma Amores.
La familia Guirao solicitó la expropiación en 2007 y, dos años más tarde sin respuesta de la administración, formuló la petición al Jurado, organismo del Estado que ha reconocido el derecho de los propietarios a ser compensados. Ya han solicitado una reunión con el alcalde, Juan Martínez Pastor, para acordar el procedimiento de pago de los 735.000 euros ya que, según recuerda el letrado, «el acuerdo del Jurado es ejecutivo y tiene presunción de validez».
Para el propietario, Ángel Guirao, «el Ayuntamiento ha tenido la enorme fortuna de la crisis, ya que la tasación ha resultado por debajo de la valoración catastral». «Hemos intentado resolverlo de forma pacífica durante todos estos años, pero los sucesivos alcaldes se han negado a llegar a un acuerdo. Por las buenas ha sido imposible», asegura el propietario.
Lugar de encuentro
El solar en cuestión ha sido durante años lugar de encuentro popular con motivo de las fiestas de San Blas. Sobre la parcela de los Guirao se instalaban las peñas locales para preparar los arroces, cuando la ermita se encontraba en una pequeña habitación de la casona contigua.
La familia Guirao posee una de las casas señoriales con más abolengo de la zona del Mar Menor. Construida por el arquitecto Pedro Cerdán, autor del Casino de Murcia, de la Casa del Piñón de La Unión y de la Casa del Reloj de San Pedro del Pinatar, entre otras, y data de 1905. No fue ajena a las vicisitudes del siglo pasado, así que durante una época se convirtió en residencia de oficiales e incluso llegó a funcionar como hospital. La controvertida transformación urbanística del entorno de San Blas, masificado con dúplex tipo colmena, no ha restado encanto histórico a la casa Benimar.
Por su parte, el alcalde, Juan Martínez Pastor, aseguró desconocer la resolución y, a la espera de tomar una decisión cuando conociera los detalles, afirmó que «supongo que el Ayuntamiento irá al contencioso».
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