viernes, 8 de enero de 2010

La ola de frío polar afecta a más de 2.000 kilómetros de carretera de 17 provincias


MADRID, 7 Ene. (EUROPA PRESS) -
La nieve, la lluvia y el hielo presente en la calzada complicaban la circulación en la tarde de este martes en más de 2.000 kilómetros de carretera de 17 provincias de toda España. Además, el temporal obligó a cerrar nueve puertos de montaña --tres de la red principal-- y forzó el uso de cadenas en otros 32 altos, según informó la DGT.
Así, alrededor de las 18.30 horas había 94 tramos de la red de carreteras bastante afectados o cerrados a causa del mal tiempo, 36 de los cuales pertenecían a la red principal. Además, la lluvia que está cayendo desde hace días en el sur de la Península obligó a cerrar otros 21 tramos.
Las provincias más afectadas por la nieve eran Albacete, Almería, Asturias, Ávila, Burgos, Castellón, Granada, Salamanca, Segovia, Soria, Tarragona, Teruel y Toledo, mientras la lluvia impedía el tránsito en tramos de Almería, Badajoz, Cadiz, Ciudad Real, Granada, Huelva, Málaga y Sevilla.
Especialmente complicado era la circulación en Teruel. En esta provincia, en la Red de Carreteras del Estado, el movimiento de vehículos era complicado en la A-1508 en Torre los Negros, la A-1702 en Villarluengo, la A-2401 en Vivel del Río Martín, la A-1511 en Pozondon, la N-211 en Pozuel del Campo, la A-23 en San Agustín y Teruel, la A-1703 en Terriente, la N-234 en Teruel, la A-1512, la A-2707 y la A-2708 en Orihuela del Tremedal.
En esta misma provincia, también en la red principal, era dificil circular en la A-2402 en Palomar de Arroyos, la A-2514 en Fonfria, la A-227 en La Iglesuela del Cid, la A-1509 en Monreal del Campo, la A-222 en Muniesa, la A-2709 en Noguera, la A-2306 en Blesa, la A-226 en Cantavieja, la A-2515 en Cella, la A-2403 en Ejulve, la N-420 en Escucha, la A-1416 en Alloza, la A-1402 en Andorra y la A-1513 en Bezas.
En el resto de la red principal, la nieve y el hielo presentes en la calzada hacían especialmente complicado desplazarse en la A-139 en Benasque (Huecas), la A-2617 en Cerler (Huesca), la N-232 en Morella (Castellón), la N-260 en Planoles (Gerona), la A-337 en Ferreira (Granada), la A-395 en Monachil (Granada), la A-2 en Medinaceli (Soria), la A-1506 y la A-211 en daroca (Zaragoza), y la A-2507 en Morata de Jiloca (Zaragoza).
En cuanto a los puertos de montaña afectados por la ola de frío polar, los problemas principalmente se localizaban en altos de Asturias, Burgos, Cáceres, Cantabria, Granada, Jaen, León, Madrid y Segovia. En la Red de Carreteras del Estado, las cadenas eran obligatorias en el puerto de San Glorio (en su vertiente leonesa y cántabra), Pontón (León), Pajares (en su vertiente leonesa y asturiana), Puerto Pico y Menga (Ávila) y Puerto de la Ragua (Granada).
RECOMENDACIONES PARA VIAJAR
Ante la alerta por la ola de frío, el Ministerio de Fomento ha esparcido 6.000 toneladas de sal y 800.000 litros de salmuera en la Red de Carreteras del Estado durante las últimas horas. Además, el Gobierno aconseja en Madrid y Barcelona usar el transporte público, especialmente el cercanías para desplazarse y desaconsejan coger el coche.
Si es imprescindible viajar por carretera, la Dirección General de Protección Civil y Emergencias del Ministerio del Interior recomienda ir muy atento y tener especial cuidado con las placas de hielo, informarse de la situación meteorológica y el estado de las carreteras, revisar el vehículo y atender las recomendaciones de Tráfico. Además, hay que tener la precaución de llenar el depósito de la gasolina y llevar cadenas, es útil llevar ropa de abrigo y un teléfono móvil con batería de recambio y/o cargador de automóvil.
Asimismo, es recomendable mantener la distancia de seguridad con el vehículo precedente, y, en caso de hielo o nieve en la calzada, no adelantar, salvo que se trate de vehículos extremadamente lentos y que se disponga de amplio espacio libre al frente, hacerse ver mediante la utilización correcta del alumbrado y circular por el carril derecho.
En caso de quedar atrapado en la nieve, se aconseja permanecer en el coche, con la calefacción puesta, renovando cada cierto tiempo el aire, y vigilar que el tubo de escape no esté obstruido para evitar que los gases penetren en el interior del vehículo. Salvo que la situación sea insostenible, lo mejor es pedir ayuda y esperar a que llegue.

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