Alexia Salas / La Verdad
Un millón de metros cuadrados de zona verde depende del trabajo de 5 operarios, lo que adjudica a cada jardineros municipal la responsabilidad de cuidar y conservar nada menos que 200.000 metros cuadrados cada uno. A esto se debe sumar las 9.200 palmeras plantadas en Los Alcázares que, si el equipo de Jardinería municipal se divide el trabajo, tocaría cada empleado a 1.840 palmeras, lo que deja claro que los jardineros del Ayuntamiento no están precisamente desocupados.
Ha sido el sindicato UGT el que ha criticado el desajuste laboral que padece la Concejalía de Jardines por la desproporción que existe entre la extensión de zona verde y el número de trabajadores. «La gente critica cada vez más el mal mantenimiento de los jardines y creen que es por los empleados, pero no es así, y estamos hartos de que se culpe a los jardineros», asegura el secretario de Administración Local de UGT, José Francisco Navarro. Para el portavoz sindical, de la gestión municipal depende «tener un municipio ecológico o abandonado». Asegura además que «no hay manera de negociar con los responsables políticos una mejor gestión de Personal». Navarro criticó que «frente al número insuficiente de jardineros, el Ayuntamiento cuenta sin embargo con tres abogados y un equipo de asesoramiento externo».
Por su parte, la alcaldesa, Encarna Gil, reconoce que «esta verano han llegado quejas de gente sobre el estado de las playas, sobre los barcos anclados, reclamaciones que llegan todos los años, pero en esta ocasión menos». Explica que «hemos tenido que desviar trabajadores para el mantenimiento de playas», aunque cuentan con el refuerzo de una empresa contratada para la poda y fumigación que acude de forma inmediata. Gil elogió la labor de los jardineros y de todos los trabajadores municipales «que este verano han trabajado como nunca». Para reforzar el servicio de parques y jardines, el Ayuntamiento esperaba una subvención del Servicio Público de Empleo y Formación, «que no ha llegado», según precisa la alcaldesa.
Un millón de metros cuadrados de zona verde depende del trabajo de 5 operarios, lo que adjudica a cada jardineros municipal la responsabilidad de cuidar y conservar nada menos que 200.000 metros cuadrados cada uno. A esto se debe sumar las 9.200 palmeras plantadas en Los Alcázares que, si el equipo de Jardinería municipal se divide el trabajo, tocaría cada empleado a 1.840 palmeras, lo que deja claro que los jardineros del Ayuntamiento no están precisamente desocupados.
Ha sido el sindicato UGT el que ha criticado el desajuste laboral que padece la Concejalía de Jardines por la desproporción que existe entre la extensión de zona verde y el número de trabajadores. «La gente critica cada vez más el mal mantenimiento de los jardines y creen que es por los empleados, pero no es así, y estamos hartos de que se culpe a los jardineros», asegura el secretario de Administración Local de UGT, José Francisco Navarro. Para el portavoz sindical, de la gestión municipal depende «tener un municipio ecológico o abandonado». Asegura además que «no hay manera de negociar con los responsables políticos una mejor gestión de Personal». Navarro criticó que «frente al número insuficiente de jardineros, el Ayuntamiento cuenta sin embargo con tres abogados y un equipo de asesoramiento externo».
Por su parte, la alcaldesa, Encarna Gil, reconoce que «esta verano han llegado quejas de gente sobre el estado de las playas, sobre los barcos anclados, reclamaciones que llegan todos los años, pero en esta ocasión menos». Explica que «hemos tenido que desviar trabajadores para el mantenimiento de playas», aunque cuentan con el refuerzo de una empresa contratada para la poda y fumigación que acude de forma inmediata. Gil elogió la labor de los jardineros y de todos los trabajadores municipales «que este verano han trabajado como nunca». Para reforzar el servicio de parques y jardines, el Ayuntamiento esperaba una subvención del Servicio Público de Empleo y Formación, «que no ha llegado», según precisa la alcaldesa.
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