La presidenta madrileña no acudió a la reunión de la dirección del PP para que «hablaran con más libertad»
COLPISA / AGENCIAS MADRID/ la Verdad
COLPISA / AGENCIAS MADRID/ la Verdad
Mientras que Rajoy intervenía en la sesión directiva del PP, Esperanza Aguirre expresaba sus quejas en un acto público al que asistía en Majadahonda a la misma hora, ya que no participó en la reunión de la dirección de su partido. «Desde luego, la intervención de Cobo no tuvo un efecto bálsamo para la crisis sino todo lo contrario pero ella también se situó en una posición estrambótica con su incomprensible ausencia y sus exigencias», se quejó un directivo.
Su ausencia ha impedido que el mensaje de unidad sonara redondo y, por contra, ha dejado abierta la duda de si van a cicatrizar en breve las heridas sufridas con la excusa de la presidencia de Caja Madrid.
Ni Aguirre ni las personas de su confianza explicaron esta ausencia de forma convincente y la presidenta autonómica se limitó a comentar que no acudiría a la convocatoria para que los directivos pudieran hablar «con más libertad y tranquilidad del caso Cobo». Pero la lideresa criticó desde fuera los términos del debate interno y denunció, ante las primeras informaciones de la reunión, que «da la impresión de que la víctima se coloca al mismo nivel del agresor».
Fuentes cercanas al gobierno madrileño señalaron que la presidenta se siente engañada aunque satisfecha de no haber acudido al Comité Ejecutivo porque «le esperaba una encerrona, después de haber cedido este fin de semana en todo lo de Caja Madrid sin contrapartidas». En medios cercanos a Aguirre, los populares siguen reclamando un castigo ejemplar para Cobo y lamentan el «silencio cómplice» de los directivos ante los ataques del vicealcalde.
Cobo no rectifica
Por su parte, el dramático y largo discurso del vicealcalde de Madrid, Manuel Cobo, ante el Comité Ejecutivo Nacional incomodó a los dirigentes del PP que vieron en su intervención un nuevo ataque a Esperanza Aguirre y la reapertura de las hostilidades que Mariano Rajoy quería zanjar en la reunión de ayer.
Según fuentes de los asistentes, Cobo pidió disculpas por sus declaraciones al mencionado diario pero no se retractó de sus ataques a la presidenta, recordó las diferencias que les enfrentaron desde que compitieron por el poder en el PP de Madrid en 2004 hasta el caso del espionaje en el que se declara víctima y del que responsabiliza a Aguirre . «Cobo dijo que se siente amenazado, que teme por su vida y por la de sus hijos pero no argumentó esa terrible afirmación», explicó un miembro del comité.
Su ausencia ha impedido que el mensaje de unidad sonara redondo y, por contra, ha dejado abierta la duda de si van a cicatrizar en breve las heridas sufridas con la excusa de la presidencia de Caja Madrid.
Ni Aguirre ni las personas de su confianza explicaron esta ausencia de forma convincente y la presidenta autonómica se limitó a comentar que no acudiría a la convocatoria para que los directivos pudieran hablar «con más libertad y tranquilidad del caso Cobo». Pero la lideresa criticó desde fuera los términos del debate interno y denunció, ante las primeras informaciones de la reunión, que «da la impresión de que la víctima se coloca al mismo nivel del agresor».
Fuentes cercanas al gobierno madrileño señalaron que la presidenta se siente engañada aunque satisfecha de no haber acudido al Comité Ejecutivo porque «le esperaba una encerrona, después de haber cedido este fin de semana en todo lo de Caja Madrid sin contrapartidas». En medios cercanos a Aguirre, los populares siguen reclamando un castigo ejemplar para Cobo y lamentan el «silencio cómplice» de los directivos ante los ataques del vicealcalde.
Cobo no rectifica
Por su parte, el dramático y largo discurso del vicealcalde de Madrid, Manuel Cobo, ante el Comité Ejecutivo Nacional incomodó a los dirigentes del PP que vieron en su intervención un nuevo ataque a Esperanza Aguirre y la reapertura de las hostilidades que Mariano Rajoy quería zanjar en la reunión de ayer.
Según fuentes de los asistentes, Cobo pidió disculpas por sus declaraciones al mencionado diario pero no se retractó de sus ataques a la presidenta, recordó las diferencias que les enfrentaron desde que compitieron por el poder en el PP de Madrid en 2004 hasta el caso del espionaje en el que se declara víctima y del que responsabiliza a Aguirre . «Cobo dijo que se siente amenazado, que teme por su vida y por la de sus hijos pero no argumentó esa terrible afirmación», explicó un miembro del comité.
No hay comentarios:
Publicar un comentario