El hombre dio positivo en el control de alcoholemia y está imputado por un presunto delito de homicidio imprudente
01.11.11 - 00:59 -
El conductor que el domingo se estrelló en Cabezo Beaza contra un camión y después huyó a pie dejando muerta a su acompañante dentro del coche ingresó ayer en la prisión de Sangonera por orden de la titular del juzgado de Instrucción número 1 de Cartagena, que en funciones de guardia y en presencia de un fiscal le tomó declaración para después imputarle por un presunto delito de homicidio imprudente. El hombre, de 29 años de edad y nacionalidad ecuatoriana, conducía un Audi A4 bajo los efectos del alcohol, aseguraron fuentes judiciales.
La fallecida era de nacionalidad paraguaya y tenía 24 años. Residía en Cartagena desde hace tiempo en un piso compartido con otras personas de origen suramericano. Otras fuentes explicaron que era madre de un niño de ocho años que vivió con ella en la ciudad hasta hace muy poco tiempo. Actualmente el menor se encontraba en Paraguay con sus abuelos. Conductor y acompañante no tenían vínculos familiares.
El grave accidente de tráfico ocurrió el domingo, poco después de las nueve y media de la mañana en la Avenida Bruselas del polígono industrial. El coche en el que viajaba la pareja circulaba supuestamente a más velocidad de la permitida en dirección a la carretera de Torreciega cuando se salió de la vía y colisionó frontalmente con la parte trasera de un camión de gran tonelaje estacionado en la puerta del almacén de muebles Blaya Gallego. Tras el accidente, el conductor del turismo se marchó dejando allí a su acompañante. El médico de una ambulancia del 061 movilizada posteriormente por el Centro de Coordinación de Emergencias de la Región de Murcia (112) comprobó que la mujer había mueto en el acto debido a las gravísimas heridas sufridas en la colisión.
Aturdido
El conductor fue localizado media hora más tarde por una patrulla de la Policía Local en las proximidades de la estación de servicio de la carretera de Torreciega, a unos trescientos metros del lugar del choque. Tenía heridas leves y síntomas de aturdimiento que los agentes achacaron tanto al accidente como al posible consumo de alcohol. La posterior prueba de alcoholemia dio resultado positivo, según fuentes judiciales, que no pudieron precisar cuánto sobrepasaba la cantidad legal permitida.
Los policías locales del servicio de Atestados que investigan las causas del accidente mortal comprobaron que el Audi A4 no dejó señales de frenada en la calzada de la Avenida Bruselas, evidencia de que el conductor no tuvo ni tiempo de reaccionar cuando perdió el control del volante en esa amplia recta de pendiente descentente y se metió bajo las ruedas traseras del tráiler. El turismo quedó inservible.
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